Lengua o Matemáticas: ¿qué priorizar en la educación para mejorar resultados?

¿Lengua o Matemáticas, qué priorizar? Es una de las preguntas que han surgido tras conocerse los resultados de la prueba Ser Estudiante 2022-2023 del Instituto Nacional de Evaluación Educativa (Ineval).

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Según esa entidad, en Lengua y Literatura 5 de cada 10 estudiantes que terminan la Educación General Básica y 8 de cada 10 estudiantes de bachillerato no alcanzan el nivel mínimo de competencias, y en Matemáticas, 4 de cada 10 estudiantes que finalizan la Educación General Básica y 7 de cada 10 estudiantes de bachillerato no alcanzan el nivel mínimo de competencias.

La prueba es una evaluación periódica a gran escala que se efectúa a estudiantes de los últimos grados de subniveles Elemental, Media y Superior de Educación General Básica (EGB), así como al nivel de Bachillerato en Ecuador.

En total fueron evaluados 36.078 estudiantes, quienes fueron escogidos de forma aleatoria y se distribuían en 1.084 instituciones educativas.

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De las 1.084 instituciones educativas, 404 fueron particulares, 53 municipales, 234 fiscomisionales y 393 fiscales.

La puntuación va desde los 400 hasta los 1.000 puntos y esta se divide en cuatro escalas: insuficiente (400 a 599), elemental (600 a 699), satisfactorio (700 a 799) y excelente (800 a 1.000).

Matemáticas, Lengua y Literatura, Ciencias Naturales y Ciencias Sociales fueron los campos de análisis.

Para Daniel Crespo, experto educativo en Chile y Ecuador y exviceministro de Educación, los resultados son catastróficos, que es lo que se sabía que iba a venir, aunque en algunos aspectos muestran una leve mejoría.

Agregó que si bien ha sido fruto de la pandemia del COVID-19, la falta de aprendizaje es algo que ya se lo ha visto desde mucho antes.

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Plantea que haya programas de recuperación de aprendizaje, que ya se implementaron en Ecuador y que daban flexibilidad a los docentes, pues otorgaban la posibilidad de priorizar en las tareas, así como dar herramientas prácticas a los docentes y que los directivos dediquen más tiempo a lo pedagógico que a lo administrativo.

A su criterio, habría que enfocarse en la lectoescritura porque un estudiante que no puede entender lo que lee, tampoco sabe entender un problema básico de Matemáticas.

Hoy la prioridad debe ser la alfabetización, la lectoescritura con mucha fuerza, agregó.

Crespo dijo que la Lengua es el habilitante para lo que viene después, mientras que la Matemática es importante para aprender a pensar y desenvolverse.

“Necesito comunicarme bien, entender lo que leo para poder sintetizar (...) un estudiante que no lee y no es capaz de resolver un problema, imagínate la frustración que tiene”, dijo.

El foco, no obstante, hay que ponerlo en ambos, añadió, pero debe haber un peso muy importante en la Lengua y la Matemática es una competencia fundamental. Destacó, además, que en las edades más tempranas debe haber mayor énfasis en la Lengua.

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“En la edad temprana voy a priorizar lo socioemocional y lo lúdico; un poquito más grandes necesito que aprendan efectivamente a entender y comprender lo que leen y mientras van creciendo la resolución de problemas va tomando un carácter mucho más poderoso”, indicó Crespo.

Para Milton Luna, exministro de Educación, hay que darle prioridad a las dos materias y a la historia.

“El lenguaje pasa por la comprensión de múltiples aspectos. El aprendizaje es integral”, sostuvo Luna.

Grimaneza Chávez, con 30 años de experiencia como docente, en todos los niveles, desde preescolar hasta universitario, indicó que la Lengua es básica porque los propios matemáticos dicen que si se puede leer bien y entender bien una pregunta, un problema, etc., después se puede resolver; pero por tradición hay que destacar ambas áreas.

Cita a una colega que le comentó que la Matemática también es un lenguaje, diferente, con sus normas y sus reglas, pero es otro tipo de lenguaje. (I)