Cerca del redondel de La Tola, en el sector de la parroquia de Checa, dos personas que viajaban en una motocicleta perdieron pista por el exceso de velocidad y cayeron a un canal de riego.

Uno de ellos logró salir por sus propios medios, pero el otro fue arrastrado por la corriente que desemboca en el río San Pedro.

Durante la madrugada del sábado, 16 de diciembre, el Cuerpo de Bomberos recibió una alerta comunitaria sobre dos personas atrapadas en el canal de agua del barrio, ubicado en el nororiente de la capital.

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Los agentes acudieron para constatar que, según el testimonio de uno de los afectados, ellos abordaron un ciclomotor y, por la fuerte lluvia, no se fijaron en la quebrada y cayeron al pozo.

La víctima que se encontraba en la superficie estaba completamente desesperada, porque mencionó que él pudo salir de inmediato, pero su compañero fue arrastrado por la corriente, según la entidad municipal.

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Los 17 bomberos que atendieron la emergencia descendieron hasta la desembocadura y realizaron un barrido de diez kilómetros para tratar de encontrar al desaparecido. Sin embargo, ante el mal clima y la poca visión, tuvieron que pedir la colaboración de la Junta General de Riego del Pisque para que cerraran una puerta del canal de agua y disminuyera la fuerza del caudal.

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En ese momento, los trabajos se facilitaron y el rescate acuático rindió frutos. Los uniformados indicaron que encontraron el cuerpo sin vida de la persona 200 metros hacia el sur del canal. Lo estabilizaron con poleas para evitar que la corriente lo siguiera arrastrando y lo sacaron en un lugar seguro.

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Medicina Legal y Policía Nacional llegaron a la zona para realizar el levantamiento del cadáver, los exámenes respectivos y evaluar las causas del incidente. (I)