Paola Rosero y sus padres llegaron a las 14:00 del último viernes, 29 de septiembre, a las instalaciones del Ejército, en el sur de Quito, para ser una de las primeras personas en ingresar al proceso de acuartelamiento del servicio militar opcional.

La chica, de 19 años, contó que durmieron en los exteriores. En las primeras horas de este sábado, 30 de septiembre, pudieron ingresar para ser parte de una ceremonia de bienvenida en la que participaron altos oficiales de Fuerzas Armadas.

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En los exteriores del policlínico del Cuerpo de Ingenieros del Ejército se ubicaron familiares que acompañaron en el proceso de acuartelamiento.  Javier González/ EL UNIVERSO Foto: El Universo

Terminó el primer semestre en la Universidad Central, pero su deseo de seguir la carrera —tal como su padre y hermano— hizo que desistiera e intentara enlistarse en la fuerza terrestre.

Leslie Cerda llegó a Quito desde la provincia del Napo. Motivada porque algunos de sus allegados son militares, y tras haber fracasado en su intento de ingresar a estudiar Enfermería en Ambato, decidió formar parte de la carrera militar.

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“Yo voy con todo. Yo sí puedo y escogí esto”, dijo sobre su decisión luego de lo que le han contado sus familiares, algunos de los cuales han sido parte de la Escuela de Soldados Iwias (’diablos de la selva’), sobre la dureza de ser militar.

Leslie y unas veinte mujeres se formaron en los patios para ser parte de una ceremonia de acuartelamiento. A unos pocos metros estaban familiares, como Narcisa Antuash.

Contó que su hija Marilyn, de 18 años, terminó el bachillerato en administración y su deseo siempre fue ser parte de la milicia, por lo que decidió apoyarla.

Segunda llamada al acuartelamiento se desarrollará el fin de semana del 30 de septiembre y el 1 de octubre

El general Gustavo Acosta, comandante general del Ejército, participó en la ceremonia de acuartelamiento.  Javier González/ EL UNIVERSO Foto: El Universo

El general Gustavo Acosta, comandante general del Ejército, quien presidió la ceremonia castrense, señaló que uno de los requisitos para ingresar es que la situación física de las aspirantes no tenga ningún novedad.

La Dirección de Movilización de las Fuerzas Armadas (FF. AA.) informó que el llamado de este sábado, 30 de septiembre, es a 5.000 ciudadanos: 4.800 varones y 200 mujeres; estas últimas serán destinadas así: 50 a Quito, 100 a Guayaquil y 50 a Cuenca.

Cumplirán el servicio cívico militar voluntario durante doce meses en diferentes unidades militares.

La formación militar es similar para ambos sexos. En los últimos tres meses, acotó Acosta, hay una capacitación en especialidades, como electricidad, peluquería, mecánica, entre otras, en coordinación con el Servicio de Capacitación Profesional (Secap).

El general Iván Vásconez, director de Movilización del Comando Conjunto de FF. AA., indicó que las mujeres recibirán capacitación en gastronomía, belleza y elaboración de conservas, en tanto que los hombres también en electricidad, suelda autógena, metalmecánica y otras ramas.

Acosta sostuvo que no hay límites si alguna persona desea especializarse en cualquiera de esas especialidades.

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En mayo del 2023 hubo el primer llamamiento al acuartelamiento militar leva 2004. Foto Carlos Barros/El Universo. Foto: El Universo

Luego de la ceremonia se explicó que las aspirantes debían someterse a un examen de eco abdominal.

En los exteriores del reparto militar había mucha expectativa por saber si las chicas eran escogidas. Junto a una maleta de madera de color plomo cerrada con dos candados estaba Edwin Llumiguano, quien acompañaba a su sobrina Evelyn.

Ellos llegaron a las 18:00 del día anterior ocupando el puesto 19. En la vereda, arropados con cobijas, pasaron la noche.

Motivos de empleo, estudios y ser aficionada a la vida militar contó Edwin que eran las razones de su sobrina para inclinarse por esa profesión.

Alexandra Guanoluisa era la última en la fila. Un tanto pensativa sobre el motivo de acuartelarse, mencionó que no se graduó del colegio, pero le gustaba la vida militar. (I)