Ambato
Neuton Ruiz, de 40 años, nunca habría imaginado que los perros que recogía en las calles y los llevaba a su casa, en el barrio Bellavista de la parroquia Santa Rosa, en Ambato, iban a terminar con la vida de su progenitora, Blanca Valle Silva, de 71 años.
Según el parte policial, cerca de las 18:00 de este martes, 21 de noviembre, se dio la alerta desde el ECU911 del ataque de perros a la adulta mayor.
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“Nos supo manifestar que minutos antes de ingresar a su domicilio se percató de que los perros de su propiedad se encontraban aglomerados en círculo y entre esos observó a su madre en el piso, quien se encontraba ya sin vida y estaba siendo devorada por los caninos”, consta en un informe preliminar.
Ruiz y su madre se dedicaban a cuidar perros callejeros, los que habían estado en su poder desde hace tres años. Por eso se desconoce aún el motivo por el cual los canes atacaron a la adulta mayor.
Jorge Sánchez, teniente político de Santa Rosa, no ocultó la preocupación por lo sucedido con la mujer. El funcionario dijo que Ruiz recogía a los perros callejeros sin ninguna técnica de albergue y sin tener una infraestructura adecuada. En la casa tenía 53 perros, expresó él.
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“Les hice el llamado de atención a los vecinos porque no comunicaron que en el lugar han tenido muchos perros que se recogían de algunos lados y mantenían encerrados en un patio a canes de diferentes razas. Habrá que averiguar por qué se dio el ataque de los animales”, refirió Sánchez.
Y añadió que con el vocal de la junta parroquial encargado del eje de medioambiente, Fernando Tisalema, trabajarán para erradicar los perros callejeros del parque.
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“Me tiene muy preocupado lo sucedido en Bellavista, porque imagínese que a una persona con la que convive por mucho tiempo le atacan (los canes), peor puede suceder en algún momento con los perros callejeros en el caso central de la parroquia”, añadió.
Ataques
Anahí Patiño, moradora del barrio Bellavista, refirió que en el sector hay preocupación por la cantidad de niños que pasan por el parque hacia la escuela y si no se hace nada, en algún momento algún perro podría atacarlos.
“Ojalá se les pueda llevar a un albergue, porque no tienen en dónde vivir y deambulan por el centro parroquial. Sí da miedo”, expresó la mujer.
Rosa Sisa, otra vecina de la zona, señaló que han visto que los perros atacan a las personas que quieren ir al baño que hay en el parque, que incluso los estudiantes tienen miedo de pasar por ahí porque hasta las papas fritas que compran en el quiosco del sector les arranchan los animales.
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“Sería bueno que se haga algo por tanto animal que deambula por la parroquia”, comentó Solange Galarza. (I)
