Más de 190 damnificados, dos casas, dos carreteras y un puente destruido son parte de las afectaciones registradas en la provincia de El Oro tras el fuerte aguacero registrado durante doce horas.

De acuerdo con el informe de la Secretaría de Gestión de Riesgos, en once cantones hubo la presencia de una lluvia moderada, mientras que en tres se dio de manera intensa desde la tarde del miércoles 2 de abril hasta la madrugada de este jueves 3.

En total, 194 personas resultaron afectadas en varios cantones, siendo Huaquillas, Arenillas, Santa Rosa, Balsas y Marcabelí las localidades más golpeadas.

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La emergencia obligó a la evacuación de familias enteras y la suspensión de servicios básicos en varias localidades.

En Huaquillas, una familia de cuatro personas perdió su hogar y fue trasladada al albergue 8 de Septiembre. Adicionalmente, otras tres familias quedaron afectadas por las inundaciones, mientras que el 80 % del servicio eléctrico colapsó.

La Empresa Municipal Regional de Agua Potable Arenillas y Huaquillas (Emrapah) tuvo que paralizar la producción de agua potable en este cantón y en Arenillas.

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El desbordamiento del río Arenillas provocó el cierre temporal de la vía E-25, que conecta este cantón con Machala. A pesar de que el caudal ha comenzado a disminuir, las autoridades mantienen un monitoreo constante.

En Portovelo, un deslizamiento afectó una vivienda de concreto, aplastando las paredes y techo.

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Las autoridades locales realizan labores de reconocimiento para evaluar los perjuicios y gestionar las acciones necesarias para la limpieza y apoyo a los damnificados.

La situación en Balsas fue crítica tras el colapso total de un puente en la vía que conecta con Marcabelí.

La base de la estructura fue socavada por las lluvias, dejando incomunicada a la población. Además, un poste de energía eléctrica cayó, provocando un apagón total en el cantón.

Marcabelí también sufrió los embates del clima. Una quebrada desbordada afectó a 50 familias, con un total de 180 personas damnificadas.

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Dos viviendas colapsaron, y seis bienes públicos, entre alcantarillas y postes de luz, quedaron destruidos. Los habitantes enfrentan la falta de agua potable y electricidad.

En Chilla, un deslizamiento obstruye parcialmente la vía que conecta Uzhcurrumi con Chilla. Personal municipal y provincial trabaja en la limpieza para restablecer la circulación.

La creciente del río Palmales generó el colapso de una vía de tercer orden en Arenillas, dejando incomunicada a la comunidad de Carcabón.

Las autoridades han iniciado inspecciones para planificar su rehabilitación.

El desbordamiento del río Carne Amarga afectó también la vía E-25, que conecta Santa Rosa con Machala, generando acumulación de agua y complicaciones en el tránsito vehicular.

La CTE desplegó personal para garantizar la seguridad de los conductores.

Las entidades de emergencia, como la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos, la Policía Nacional y los Cuerpos de Bomberos, trabajan en la atención de damnificados y la recuperación de zonas afectadas. (I)