El arroz, el principal carbohidrato y fuente de proteína de los ecuatorianos -por su alto consumo-, puede prepararse de una manera segura para reducir los riesgos de contaminación por arsénico, metal pesado considerado “cancerígeno” y “una de las diez sustancias químicas más preocupantes para la salud pública” por la Organización Mundial de la Salud.