En un producto de consumo tan masivo como el arroz, que está presente en el 30% de la dieta de los ecuatorianos, también se encontró metales pesados, tan tóxicos para la salud humana como el plomo hallado en un polvo de canela, en salsas de tomate, en una premezcla para preparar conos de vainilla de la marca Bakels y en una morcilla de la marca de embutidos Oro.