Más energía se sumará al Sistema Nacional Interconectado (SNI). Lo confirmó este martes, 24 de diciembre, la ministra encargada de Energía y Minas, Inés Manzano, al anunciar durante una entrevista radial que una segunda turbina de la central Alluriquín, parte del proyecto hidroeléctrico Toachi Pilatón, entró en pruebas experimentales. Además, adelantó: “Queremos abrir las áreas de generación, transmisión y distribución para la inversión privada”.
“En la central Alluriquín se iniciaron las pruebas experimentales de la unidad de generación 2. Esto forma parte de un protocolo obligatorio. Ejecutamos también trabajos para potenciar las líneas de transmisión”, destacó la ministra.
Publicidad
La generación de esta turbina, la segunda de las tres que tiene la central hidroeléctrica Alluriquín, se sumará a los 68 megavatios que empezó a generar una primera turbina el 16 de diciembre pasado. Cada una de las turbinas tiene capacidad de generar 68 MW; es decir, de momento la central podría generar 136 MW.
La ministra Manzano comentó que el lunes, 23 de diciembre, comenzaron a funcionar las dos turbinas y falta una más. Añadió que el viernes 20 de diciembre comenzaron las pruebas técnicas, para luego pasar a las experimentales que se hace con el Operador Nacional de Electricidad (Cenace) y que serán hasta el 27 de diciembre. “Ayer (el lunes) por primera vez tuvimos al mismo tiempo las dos turbinas trabajando, tenemos que llegar a la tercera...”, dijo en radio Centro.
Publicidad
Para que se entienda de las pruebas experimentales, explicó que se trabaja junto con el Cenace y da órdenes como: ‘trabajen 48 horas a tope máximo, apaguen, enciendan, pónganse a 10 MW’, esto “porque así funciona nuestro sistema, no todo el tiempo se requiere al 100 %, pero esta vez, sí, pero tenemos que hacer todas estas pruebas que son parte del protocolo de Cenace, de ahí que entran el 27, aunque ahora están generando, pero entran el 27 las dos a full”.
De la tercera unidad, dijo que tiene un tema de un repuesto, que llega a mediados de enero y eso hace que no se pueda iniciar con las pruebas técnicas.
El complejo Toachi Pilatón está integrado por las hidroeléctricas Alluriquín, cuya capacidad de generación es de 204 MW; Sarapullo, 49 MW; y una minicentral de 1,4 MW: en total, 254,4 MW de potencia instalada. Manzano dijo el 16 de diciembre pasado que para enero se espera que el complejo genere toda su capacidad al tope, es decir, 254,4 MW.
El complejo Toachi Pilatón se encuentra entre las provincias de Pichincha, Santo Domingo de los Tsáchilas y Cotopaxi; por eso aprovechará las aguas de los ríos Pilatón y Toachi, que están en la vertiente occidental de la cordillera de los Andes, aportantes a la cuenca del Pacífico.
A la consulta ¿de qué tiempo estamos hablando y qué proyectos se están llevando a cabo para que en el 2025 ya no hayan apagones?, esto luego de que el presidente Daniel Noboa anunciara que no habrá apagones en el mediano plazo, la ministra explicó que para el Gobierno mediano plazo es de 18 a 24 meses, porque hay muchas soluciones que necesitan implementar
Para que se entienda sobre la situación, la funcionaria dijo que hay un déficit de alrededor de 1.800 MW, que se viene arrastrando desde hace diez años. “Es lo que el plan maestro de electricidad nacional requería desde hace diez años a diferentes gobiernos, de hecho el último plan de electricidad, que es del 2023, tampoco se cumplió, no se cumplió en el año de gestión del gobierno anterior”, dijo.
En virtud de ese déficit, indicó que tienen que ir viendo la energía en firme y tienen modelos de crecimiento diferenciado, una matriz energética diversificada, que sea limpia, que está relacionada con geotermia, “ojalá más biomasa por parte de los privados”, con proyectos solares privados, dijo que va a hacer un público, pero lo que buscan son los proyectos privados y también están las hidroeléctricas, porque “al final del día es una energía que necesitamos y hay que tener una variedad”.
La energía en firme, “es todo lo que estamos proyectando, que tenemos que aumentar 300 MW más o menos anuales de energía en firme, que vienen a ser las térmicas”. Añadió que dentro de la térmica están tratando de hacer un proyecto ciclo combinado, que demoran 24 meses, mientras que la eólica y fotovoltaicas tienen una duración de 18 meses. “Nosotros estamos programando todo lo que estamos haciendo es para verlo más o menos en año y medio a dos años, yo realmente no le deseo a ningún gobierno, que sufra lo que nosotros hemos sufrido, que tenga dar la cara y decir 14 horas de suspensión de energía”.
Agregó que han realizado “gestión, gestión y gestión” de recuperación, rehabilitación de todo el parque termoeléctrico, más las compras, en la cual se incluye un tipo de maquinaria, turbinas duales, es decir, que funcionan a diésel y gas, más la barcaza, y adicionalmente la proyección de gas natural que también tiene que ver con el tema energético.
En cuanto a la generación flotante, la ministra comentó que se va triplicar, esto porque ya se cuenta con 100 MW a cargo de Karpowership, que también entregará 100 MW más a través de la embarcación Murat Bey, que recientemente llegó a Las Esclusas, en el sur de Guayaquil, el contrato está cargo de Elecaustro. “Va a venir otra más de 100 MW adicionales, al final del día vamos a triplicar la gestión en tema de energía flotante”, dijo.
La ministra comentó que tienen contratos pequeños, 20 MW que son para El Descanso, una subestación; aparte tendrá otra con Gasvesubio, una turbina de gas, que va dar entre 14 y 15 MW.
Central de Toachi Pilatón: ingenieros trabajaron todos los días para acelerar los trabajos
Manzano espera que con todas estas soluciones no se vuelvan a repetir los apagones que Ecuador soportó desde septiembre hasta el 19 de diciembre pasado. “Agradezco a toda la ciudadanía por este esfuerzo. He sufrido dar noticias duras, como las catorce horas de apagones; y las lindas, como decir ‘Se acabaron los apagones’. Esperemos que esto no vuelva a ocurrir y tener un sistema eléctrico transparente”, señaló la ministra.
Para esto, Manzano agregó que se trabaja en la conservación de los embalses para afrontar cualquier estiaje futuro. (I)