En octubre del 2019 la Unión Europea (UE) advirtió a Ecuador con una tarjeta amarilla por considerarlo un país no cooperante y que no contaba con los elementos de control necesarios contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR), pero el sector pesquero nacional espera que ese estatus no llegue a cumplir los cinco años y se levante en septiembre, cuando se tiene prevista una nueva visita de los delegados de la Dirección General del Mar de la Unión Europea.