El vocal de los trabajadores ante el Consejo Directivo del IESS, Richard Gómez, considera que no han sido técnicos los despidos o desvinculaciones realizadas este fin de año en el Hospital Carlos Andrade Marín. Este 2 de enero se conoció la salida de 124 empleados de esa entidad de salud. Considera que la gran mayoría son del área operativa, es decir, médicos, enfermeras, entre otros. Esto genera el riesgo de que se aumente la derivación hacia privados. Las desvinculaciones de personas con contratos ocasionales fueron anunciadas como parte de un plan de optimización del talento humano del IESS entidad en la que existen 34.000 funcionarios. Gómez habló, además, de la necesidad de que el Estado emita un plan de pagos de las millonarias deudas que tiene con el IESS y de un plan de purgas de mora para los empleadores.