La Ley Orgánica de Competitividad Energética, cuyo objetivo es “promover soluciones económicas y de generación de energía a fin de superar la crisis energética, optimizando el manejo de recursos públicos”, y que fue aprobada el 10 de enero en segundo debate por la Asamblea Nacional, trae noticias positivas en el tema de inversión y ambiental, aunque ya es criticada por algunos sectores, pues ha incorporado temas tributarios, lo que consideran que sería inconstitucional.