Los procesos de construcción de vivienda se han acelerado en algunas empresas antes de que lleguen las lluvias que se pronostican con el fenómeno de El Niño. Quienes buscan una también están pendientes de eso y de si el cambio de Gobierno afectará la situación del país e influirá para cerrar la compra.

Mishell Pérez, Darwin Satán y Carlos Torres llegaron con esas inquietudes a la feria del Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (Biess), que se desarrolla en el Centro Convenciones de Guayaquil hasta este domingo 3 de septiembre y donde se promocionan más de 30 proyectos inmobiliarios. Ellos son parte de los más de 10.000 visitantes previstos durante los cinco días de esta feria.

Los agentes inmobiliarios se han preparado ante estas preocupaciones de los clientes y ofrecen reajustes, reubicaciones y están abiertos a escuchar cada caso: “nadie está exento de un problema económico, de una enfermedad”, afirman.

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Biess realizará dos ferias de vivienda entre agosto y septiembre; una será en Guayaquil y otra en Quito

Mishell quiere comprar una casa con su pareja, ahora alquilan y están ahorrando. En su recorrido por la feria supo de beneficios como descuentos en el valor de la entrada, unos $ 2.000, y acabados para la casa, los cuales “normalmente no los dan”. Están decididos a comprar la vivienda por tema de seguridad, pero el asunto económico los podría detener en continuar con el proceso, por el ambiente político que influye en la economía. “Esas serían las razones por las cuales pensaríamos en que no vamos a comprar la casa, por temas económicos y dependiendo como vaya la situación del país”, afirmó.

Darwin y Carlos también coincidieron en que la seguridad es una de las razones que los lleva a buscar una vivienda en una urbanización privada. Para el primero, “lo primordial es ahorrar dinero por el fenómeno El Niño que viene. No sabemos qué tan fuerte van a ser las consecuencias en cuanto a la comida, salud y el trabajo. No quiero pasar como pasé en la pandemia, no estuvimos preparados y cuando llegó no sabíamos qué hacer”.

Dado esos casos, los agentes inmobiliarios ofrecen algunas alternativas para dar tranquilidad a sus potenciales clientes ante las posibles inundaciones.

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Cristian Jaime, ejecutivo de negocios de la urbanización Los Prados, señaló que cubren ese “tipo de preocupaciones”. En cuanto a las inundaciones, cuentan con un alcantarillado totalmente nuevo, por lo que cree que no tendrán “inconvenientes”. “Es un proyecto urbanístico en donde hemos mantenido el tema del relleno alto. Está casi al mismo pie de la carretera, eso hace que el drenaje sea mucho más fluido”

Asimismo, señaló que como facilidad para el cliente tienen la opción de la entrega de casa “a largo tiempo” y con lo cual pueden reubicarse a otra etapa y de este modo pagar la entrada en un tiempo más extendido, así pagarán poco a poco. “Nadie está exento de una enfermedad, de un problema económico, todo eso como proyecto lo pensamos”. En Los Prados ofrecen viviendas desde los $ 78.500 hasta los $ 100.000.

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La jefa del departamento de crédito de Durán City, Diana Gualpa, indicó que tienen la opción de reajustes o refinanciamiento para el pago de la entrada.

“Tenemos casos en los que el cliente se ha quedado sin trabajo, le disminuyeron sus horas extras, por el fenómeno de El Niño, esto suele pasar bastante. Entonces podemos refinanciar la entrada del cliente, es decir, si pagaba una cuota de $ 170 mensual, podemos ajustar esa cuota a un nuevo presupuesto conservando el lote que reservó para que no pierda su ubicación”, explicó. En Durán City las casas van desde los $ 43.990 hasta los $ 89.000.

La seguridad es cada vez más prioritaria a la hora de comprar una vivienda y casi alcanza al precio en importancia

Por su parte, el asesor comercial de la urbanización La Gran Vittoria, Joffre Castillo, comentó que se escucha el caso del cliente, están conscientes de que pueden atravesar situaciones de enfermedades catastróficas o que estén ligadas a la propia inseguridad por la que atraviesa el país.

“La inmobiliaria siempre en estos casos ha dado la apertura a que al cliente se le espere un tiempo hasta que pase la situación”, afirmó. La Gran Vittoria tiene casas desde los $ 83.500 hasta los $ 118.000.

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En el Centro de Convenciones se realiza una nueva edición de la feria de vivienda del Biess, empezó el miércoles 30 de agosto y se extenderá hasta el domingo 3 de septiembre. Foto: Carmen Carchi

Los efectos a favor y en contra

En ese contexto, el director ejecutivo de la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Vivienda del Ecuador (Apive), Jaime Rumbea, señaló que el interés de las personas en adquirir una vivienda “no se ve afectado con el resultado de las elecciones”, pero que sí existió “algo de nerviosismo sobre qué podía suceder”. Ahora, cree que los resultados “han demostrado un cierto nivel de balance en la distribución de las fuerzas políticas y eso es un buen augurio independientemente de quién sea el candidato presidencial que gane, es un buen augurio para la estabilidad del país en el sentido de que la distribución, la representación de las fuerzas”.

Una expectativa favorable es que la reforma tributaria que entró en vigencia en julio liberó ingresos de los trabajadores y eso “es una gran noticia que se espera que se capitalice en el marco de la feria”.

En cambio, el factor climático sí los pone alerta. Las empresas están acelerando procesos que requieran tener un clima seco, en lo que respecta a infraestructura, vías, canales, etc., que son muy difíciles de concluir una vez que arrancan las lluvias. Rumbea dijo que “si logran hacer esos procesos antes de que vengan las lluvias con fuerza, un eventual El Niño, no debería haber disrupciones mayores en los procesos comerciales más allá de un día, unos días de retraso que se producen en cualquier lugar con lluvias muy fuertes”.

Apive acaba de firmar un convenio con la Asociación de Bancos Privados del Ecuador, el cual permite monitorear la necesidad de crédito que tienen los más de 10.000 hogares que tienen contratos de construcción de nuevas viviendas a nivel nacional: casas que se están construyendo, que fueron contratadas en planos en meses anteriores y que se tienen que entregar en los meses de El Niño. El monitorio de esa necesidad de desembolso se dará para administrar el riesgo de que estos se retracen o no estén disponibles. (I)