Robos y amenazas de extorsiones también retrasan la construcción de la central térmica Esmeraldas III

La construcción de la nueva central térmica Esmeraldas III, que aportará 91 megavatios (MW), reporta un avance del 90 %. Los trabajos se ejecutan en medio de un ambiente de inseguridad, confirmó Nicolás Pic, gerente y propietario de la empresa Austral Technical Management (ATM).

Un trabajador fue víctima de atraco y han recibido amenazas de extorsiones “cada día”. “Mataron a un señor a 300 metros de la planta”, mencionó el gerente, quien estuvo presente en la obra la semana pasada. La infraestructura está 3,5 kilómetros de la refinería de Esmeraldas.

La situación no facilita el trabajo, dijo. “Soy ingeniero. No soy ni abogado ni financista ni político. Y esto no sé manejarlo. Es muy difícil y nos complica la vida, pero así existe. En mi experiencia, he arrancado una planta en Costa de Marfil con la pistola acá (apuntó con un dedo a su cuerpo)”, expresó Pic, empresario francés con nacionalidad chilena y argentina.

Explicó que la inseguridad ha complicado los tiempos de las obras, porque, por ejemplo, un trabajador demora en llegar a la planta porque en el camino fue atracado. Además, los retrasos “han afectado mucho los costos finales” para la contratista. Los valores son asumidos por la empresa, indicó el gerente.

Aseguró que el Gobierno hace esfuerzos para apoyar con el resguardo, con presencia de policías y militares. “El Estado de Ecuador hace mucho para ayudar y garantizar nuestra seguridad”, reiteró.

Austral Technical Management (ATM) ha enfrentado problemas logísticos para traer desde Líbano los equipos que generarán 91 MW en Esmeraldas. Se tenía previsto que la planta entregue energía desde el 27 de enero; sin embargo, aún no hay una fecha definida para que esto ocurra.

Nicolás Pic prometió que todo funcionará en su totalidad hasta antes de abril, cuando se prevé que se presente una nueva época de sequía en el país.

Por el momento, ya se encuentran en el país 82 equipos de generación con capacidad de 35 megavatios, pero aún no están instalados, aportarían al Sistema Nacional Interconectado (SNI) a mediados de febrero. (I)