Su fundación en 1913, de la mano de los hermanos Segundo y Tomás Pinto, marcó el camino que Empresas Pinto ha recorrido durante 110 años. Ahora, con más de un siglo de vida y dirigida por la cuarta generación de la familia, la marca ecuatoriana se enfoca en un ambicioso plan para crecer en ventas en el 2024, respaldado en estrategias comerciales y prácticas sostenibles que también han tenido un impacto social.