Cada vez más líneas aéreas migran al sistema de venta de pasajes sin equipaje, sin servicio de alimentos, sin la posibilidad de escoger asiento o hacer cambio en las fechas. En teoría los tiquetes se abaratan, sin embargo, las protestas de usuarios persisten por diferentes motivos. A la Dirección General de Aviación Civil (DGAC), se presentaron 489 reclamos formales el año pasado.