La empresa Boeing estaba ayer en el punto de mira tras el accidente de un 737 MAX 8 de la compañía Ethiopian Airlines, en el que murieron 157 personas y que llevó a aerolíneas de varios países a inmovilizar uno de los modelos faro del gigante aeronáutico estadounidense.
Ethiopian Airlines anunció que fueron recuperadas ayer las dos cajas negras del avión accidentado, que registra los datos técnicos del vuelo y graba conversaciones de la cabina.
“Partimos del principio que encontraremos la causa del accidente en los datos de la caja negra”, indicó la compañía.
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El accidente del domingo, en un campo cercano al pueblo de Tulu Fara –60 km al sudeste de Adis Abeba, desde donde había despegado rumbo a Nairobi–, constituye un nuevo revés para Boeing. Otro 737 MAX 8, un éxito comercial, se estrelló también unos minutos después del despegue el 29 de octubre en las costas de Indonesia, tragedia en la que murieron 189 personas. Una de las cajas negras del aparato de la compañía indonesia Lion Air señaló problemas con el indicador de velocidad.
Luego del accidente del domingo, Ethiopian Airlines inmovilizó sus otros cuatro aviones Boeing 737 MAX 8.
China pidió a las aerolíneas en su país que no usen ese modelo de avión hasta que las autoridades estadounidenses y Boeing garanticen la seguridad de los vuelos. Aerolíneas de Corea del Sur, Mongolia, Indonesia, Marruecos hicieron lo mismo. Boeing tiene en total 5.011 encargos de este aparato de todo el mundo.
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El avión accidentado tenía un año de uso. Las víctimas del accidente eran de 35 nacionalidades. (I)
