Mayor conectividad aérea y, por consiguiente, más comercio y turismo. Esas son algunas de las ventajas que mencionó el ministro de Comercio Exterior, Pablo Campana, sobre el Decretro Presidencial 256 a través del cual se adopta como política pública nacional la plena liberalización del transporte aéreo por parte del Ecuador, a excepción de tráfico de cabotaje.