Desde los primeros meses de este año, 250 vehículos nuevos están guardados en un terreno en las afueras de Quito sin que nadie aún los haya usado. Estos son unos patrulleros para la Policía Nacional, parte de una nueva flota de 4.157 carros que en 2013 fueron adquiridos para renovar los que actualmente tiene esa institución en todo el país, informó este domingo Ecuavisa, en su programa de investigación Visión 360.

Sin concursos, ni licitaciones y bajo un acuerdo de emergencia indefinida, el Ministerio del Interior firmó un contrato por 196'190.000 dólares para la compra de estos carros, en los que se incluía el mantenimiento y los repuestos hasta los 120.000 kilómetros de recorrido o cuatro años de uso. "Al actual gobierno le ha faltado dinero para terminar de pagarlos y llevarlos a las calles, pero con cientos de vehículos almacenados surge la duda si se compró en exceso", se señala en la investigación denominada "Patrulleros de sobra".

Desde hace unos seis meses, los 250 vehículos se encuentran, según moradores del lugar, guardados en un terreno del sector El Condado, barrio Mena del Hierro, al norte de la capital y fueron comprados a la empresa Aekia del Grupo Eljuri. El terreno pertenece a la Dirección de Operaciones de la Policía Nacional y está junto a la mecánica policial, informa Ecuavisa.

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"Esto es parte del Proyecto de Desconcentración de Servicios del Ministerio del Interior. Este departamento es el encargado de toda la distribución de los vehículos...", señaló uno de los policías, que guardó su nombre en reserva, encargados de mantenerlos en ese terreno.

Daniel Santos, gerente de la oficina de Desconcentración de Servicios de Seguridad, dijo a Visión 360 que: "los vehículos están en un proceso de entrega por parte de la empresa contratista Aekia al Ministerio del Interior; tienen que pasar por un proceso administrativo para esto. Básicamente para la entrega el vehículo tiene que salir pagado y con matrícula, estamos en este proceso, estamos en cronograma de entrega, hasta finales de año serán entregados estos vehículos".

Ricardo Rosales, gerente de la concesionaria Aekia, señaló que: "no están abandonados, de lo que entendemos no es nuestra responsabilidad... Cuando hubo el cambio de autoridades tenían que hacer un ajuste a sus presupuestos, el Estado no tenía el presupuesto al día y mientras no hacían esta asignación o este arreglo de partidas presupuestarias, los vehículos estuvieron retenidos hasta que fueron nuevamente asignados".

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El contrato con Aekia termina este 31 de diciembre, pero hace cuatro años, el 4 de enero de 2013. el ministro del Interior de ese entonces, José Serrano, firmó un acuerdo de emergencia por seis meses, que evitó el concurso y la licitación, facilitó la adjudicación de este contrato a la empresa Aekia del Grupo Eljuri, que fue la única que por tres ocasiones presentó propuestas que se ajusten a las exigencias del Ministerio. La investigación de Ecuavisa indica que se habría invitado a otros dos concesionarios al proceso para la adjudicación del contrato, pero una de ellas confirmó a Visión 360 que nunca recibió esa invitación. En julio de 2013 Serrano amplió la emergencia de forma indefinida.

Rosales afirmó que de los 196 millones de dólares, se han devengado 150 millones aproximadamente y se encuentran impagos 24 millones, que es un monto equivalente a 600 unidades. Sin embargo, el Ministerio del Interior ha informado que la deuda es de 22 millones de dólares.

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El general (r) Jaime Baca, exdirector de Operaciones de la Policía Nacional, manifestó que "un vehículo patrullero dentro de Estados Unidos no supera los 35.000 dólares, inclusive con los reforzamientos en las partes frontales, los guardachoques, las luces guías, inclusive la computadora adentro".

Se compraron 2.057 jeep Sportage a $ 23.741 cada uno; 2.100 automóviles Cerato a $ 19.187 por unidad, pero para convertirlos en patrulleros, Kia puso 57 implementos entre nacionales e importados. Fabricio Jácome, gerente de servicios de Kia, indica que entre las adecuaciones hay componentes que no se ven, como los cableados, además de una computadora que comanda todo el sistema del patrullero.

Con estos implementos, el jeep Sportage pasó de $ 23.741 a $ 42.643, que con el mantenimiento por los 120.000 kilómetros o cuatro años terminaría en los $ 51.070; mientras el Cerato, de $ 19.187 subiría a $ 36.537 tras adaptarlo a patrullero y con el mantenimiento por el mismo período que el Sportage finalizaría  a un costo de $ 43.399. Sin embargo, el sistema de comunicación y el GPS no son parte de este equipamiento.

Visión 360 pidió al actual ministro del Interior, César Navas, la nómina de administradores de este contrato, que son doce, pero que "sin explicación alguna" sacaron de la lista a María Paula Christiansen quien en octubre de 2014 firmaba como administradora del contrato, según consta en un documento dirigido a un general de la Policía. El Ministerio contestó que ese nombre se omitió por un error involuntario, debido a la falta de un adecuado archivo de los documentos.

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Los primeros patrulleros entregados cumplieron su vida útil, señala Ecuavisa, pero se dieron cuenta que pese a cumplir los 120.000 kilómetros aún podían servir, por lo que el Ministerio del Interior y Aekia firmaron un contrato complementario para subir el mantenimiento y los repuestos hasta los 250.000 kilómetros de recorrido, por lo que el nuevo costo del jeep Sportage subió a $ 65.973 y el Cerato pasó a $ 56.497.

Luego, en el complemento del contrato se acordó no adquirir 1.025 unidades, por lo que sólo habría ahora 3.132 patrulleros. El exministro del Interior, José Serrano, no ha dado su versión al respecto.

En Tambillo, al sur de Quito, en la Unidad de Equitación y Remonta, aparece otro espacio con camionetas y jeeps que salieron de circulación para ser reemplazados. Es un cementerio de carros que aguardan la subasta o el remate, finaliza su investigación Visión 360. (I)