Doce detenidos en la operación antidroga ejecutada el viernes pasado en el puerto pesquero de Anconcito, en Santa Elena, llegaron ayer a la Unidad Multicompetente Penal del cantón La Libertad, donde se desarrolló la audiencia de flagrancia. Llegaron esposados y resguardados por policías. Familiares identificaron a algunos como estibadores sin vínculos con organizaciones delictivas.
En la playa y en una casa de Anconcito, la Fiscalía y grupos especiales de la Policía hallaron más de media tonelada de cocaína, en específico 665,31 kilos. Se presume que sujetos iban a realizar dos embarques, que el primero estaba listo en la playa, en el balde de una camioneta.
El Matal es una de las playas de la provincia de Manabí en la que anteriormente han intervenido organizaciones narcodelictivas, que al parecer ahora buscan operar en la Península.
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“Estoy aquí por mi yerno, él solo carga en la playa, él es inocente, pedimos justicia, ellos no tienen culpa de nada”, dijo sollozante Felipa Reyes, refiriéndose a un cargador de pesca que allí conocen como forzudos.
De 23 detenidos inicialmente, once fueron liberados antes de la audiencia. Ocho, del grupo de los forzudos, quedaron con prisión preventiva (por 30 días) y cuatro con medidas sustitutivas. La audiencia duró aproximadamente 3 horas.
Antes, Juan Pazmiño, defensor del dueño de la lancha amarilla donde supuestamente iba a ser embarcado el alcaloide, dijo que su cliente fue liberado, que nada tenía que ver con el delito de tráfico internacional de sustancias estupefacientes. Confirmó la propiedad de la lancha y la deuda con una casa comercial por dos motores, también considerados evidencia, pero alegó que existe la documentación, y aseguró que poseía la orden para retirar los insumos.
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“Se determinó que en la lancha amarilla no iba a ir la droga, porque cada motor para ser instalado se demora un día, la Policía se apresuró al apresar a todos y al decir que en esa lancha iba a ir la droga debido a que otra lancha, según declaró mi cliente, iba entrando en ese momento”, señaló Pazmiño.
Ana Luzuriaga, fiscal del caso, comentó que supuestamente la droga provenía de Colombia, que ingresó por Atahualpa (Santa Elena) y que llegó a la casa de Anconcito cerca de las 18:00 del jueves 4, que esa noche pretendían sacarla por mar, rumbo a Centroamérica. “Es una organización internacional, con la colaboración de la Policía de Colombia se pudo coordinar”, dijo la fiscal.
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En Guayaquil, Diego Fuentes, viceministro del Interior, indicó que en la desarticulación de 20 organizaciones, incluida la de Anconcito, hay un registro de 157 detenidos, 222 allanamientos. “En lo que va del año se han incautado 23,3 toneladas de droga. 5,6 toneladas de tráfico para consumo interno y 17,6 toneladas para tráfico internacional”, indicó. (I)
