Su cumpleaños “ya no existe”. Lo dice Pedro Cujilema con voz entrecortada y sus ojos llenos de lágrimas. Respira profundo y cuenta que el 16 de abril de 2016 llegó a los 40, en medio de un profundo dolor. En 42 segundos, el terremoto de 7,8 en la escala de Richter le arrebató a su familia, a sus padres, esposa y dos de sus tres hijos.