El tiempo de Adviento, que prepara a los cristianos para la celebración de la Navidad, abarca las cuatro semanas previas a la Nochebuena. Durante este periodo, se lleva a cabo un proceso de reflexión y espera, recordando la llegada de Cristo al mundo. Este tiempo comienza con el primer domingo de Adviento, que varía cada año dependiendo del calendario litúrgico, y culmina en la víspera de Navidad.