Se ha demostrado que una vacuna experimental contra el cáncer trata cuatro de cada diez tumores de páncreas, lo que supone un rayo de esperanza para los pacientes con esta agresiva enfermedad. En un estudio con ratones, la inyección “eliminó” el 43 % de los tumores de páncreas y evitó que los cánceres regresaran cuando recayeron.