Si la muerte de un animal no humano es necesaria, “debe ser instantánea, indolora y no generadora de angustia. Todo acto que implique la muerte innecesaria de un animal no humano es un biocidio, es decir, un crimen contra la vida”. Esta figura se establece en el proyecto de Ley Orgánica para la Promoción, Protección y Defensa de los Derechos de los Animales No Humanos (LOA) que fue presentado el pasado 19 de agosto en la Asamblea Nacional para su debate.