Los vinos más costosos del mundo son elaborados en Francia: uno de reciente cosecha de la zona de Borgoña cuesta alrededor de 6.000 dólares, pero hay quienes han pagado más de medio millón de dólares por tener el placer de beber una de las pocas botellas que quedan de Romanée Conti, cosecha 1945. Por otro lado, Italia es el mayor productor en litros de vino a nivel mundial y posee también la mayor variedad de cepas, con más de quinientas uvas distintas de las cerca de 1.600 que se cultivan para hacer vinos alrededor del planeta.