La comida servida en bowls o tazones se ha vuelto una tendencia a nivel mundial por diferentes razones: la creativa forma de juntar proteínas, carbohidratos, vegetales, frutas y grasas saludables en un plato hondo en lugar del tradicional plato llano, la facilidad de su elaboración y las propiedades nutritivas que se pueden encontrar en una sola presentación.