“No merecemos pasar por tanto dolor, deberíamos estar en casa, felices, conversando de algo, hablando sobre tus hijos, que ahora se quedan solos, no aquí, llorando por tu partida”. Eran las palabras que, entre lágrimas, decía una familiar de Mayvelin Camila Vergara Martillo, de 24 años, quien junto con su esposo, Jefferson Dávila Hurtado, fue una de las 17 víctimas de la masacre del bar La Clínica en la parroquia Guayas, en El Empalme.
La tarde de este martes, 29 de julio, sus restos fueron sepultados en el cementerio general de dicha localidad, a pocos pasos de donde fue la masacre. Desde allí se podía ver este bar, el escenario que causó terror a los habitantes de esta localidad.
Víctimas de la masacre en El Empalme: quiénes eran las personas asesinadas
La noche de este domingo, 27 de julio, sujetos armados ingresaron al sitio y dispararon indiscriminadamente contra todos los asistentes en esa zona, donde no solo está el bar, sino que hay comedores y otros comercios.
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Este martes en los exteriores de la iglesia San Francisco de Asís se colocaron los féretros de Mayvelin, Jefferson, de sus vecinos José Loor, Mariuxi Jennifer Bustamante Cerezo y Mauro Espinoza.
Junco, el perro de José Loor, permanecía en la puerta del inmueble, mientras el féretro era sacado de la casa. La mirada del can transmitía tristeza, pero pasaba desapercibida por las escenas de dolor que protagonizaban los familiares de Loor, albañil que murió por disparos en las piernas y la espalda.
El párroco de la iglesia hizo una misa general haciendo un llamado a la paz, la unión y el acercamiento a Dios.
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En medio de llanto y dolor, los familiares de las víctimas indicaron que todas eran inocentes y le dejaban a Dios la potestad de hacer justicia.
Después de los primeros sepelios, al mismo camposanto arribaron los cuerpos de Wilton Domingo Cusme Palma, Daniel Mauricio Quintero Quintana y Jean Carlos Pazmiño Palma.
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Durante el acto, los familiares de las víctimas usaron camisetas estampadas, detonaron juegos pirotécnicos y las despidieron con mariachis. Se vivieron momentos muy emotivos y de dolor durante el entierro.
Las otras víctimas de esta masacre fueron sepultadas en El Empalme, en Santo Domingo de los Tsáchilas y en Guayaquil.
Óscar Valencia, mayor de la Policía, declaró que durante todo el sepelio hubo presencia policial y se seguirán realizando rondas y operativos para garantizar la seguridad de la comunidad.
Sobre las circunstancias del ataque, el oficial apuntó que los sujetos armados buscaban a alias 4k, integrante del grupo delictivo Los Choneros y hermano de Boris P., conocido como el ‘zar de las drogas’, quien fue capturado en septiembre de 2024 en una intervención militar.
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El sujeto habría abandonado el bar La Clínica a bordo de un taxi. Los asesinos, al llegar, dispararon contra todos los que permanecían en el sitio sin importar que fueran inocentes.
Valencia agregó que los atacantes, al parecer, habrían llegado a la parroquia Guayas desde el cantón Quevedo. (I)
