Independiente del Valle inicia este sábado la defensa del título de la Copa Libertadores sub-20, torneo que se jugará en Quito entre el 5 y 20 de febrero, con participación de otros dos clubes ecuatorianos: Liga de Quito y Orense.
Los rayados levantaron la Copa en el 2020 tras derrotar en la final al argentino River Plate (2-1) en la edición que se disputó en Paraguay.
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Por plantilla e infraestructura, los negriazules están entre los favoritos al título. “Lo vemos bien, y si nos califican así es porque el club ha trabajado de buena manera”, dijo Miguel Bravo, director técnico de Independiente.
Bravo llegó esta temporada al club negriazul para dirigir Independiente Juniors, filial de los del valle en la serie B de la LigaPro, pero tendrá como encargo el equipo sub-20 que dispute la Copa.
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La preparación del plantel se inició el 3 de enero. “Juntamos al grupo, algunos son del primer equipo de Independiente y otros de nuestra filial”, dijo Bravo, en declaraciones que recoge la organización del torneo.
“Buscamos darle identidad al plantel, un modelo de juego, apegados a la idea característica del equipo de primera división. Sabemos que el torneo es fuerte, muy complicado, pero hay confianza en volver a ganarlo”, indicó el técnico ecuatoriano.
Independiente es cabeza de serie en el grupo A, que completan Caracas FC (Venezuela), Sporting Cristal (Perú) y Blooming (Bolivia).
En el grupo B están Liga, Internacional (Brasil), Peñarol (Uruguay) y Millonarios (Colombia), mientras que el grupo C lo integran Orense, Newell’s Old Boys (Argentina), Guaraní (Paraguay) y Universitario de Concepción (Chile).
Los albos llegan como campeones nacionales del torneo sub-18 y los machaleños como los terceros mejor ubicados del torneo local, detrás de Independiente.
Los negriazules jugarán la fase de grupos en su casa, en el estadio Banco Guayaquil, mientras que el otro escenario elegido para el torneo es el Olímpico Atahualpa.
Independiente abre el torneo este sábado (15:00) ante Caracas, el 8 de febrero se mide con Sporting Cristal y el viernes 11 con Blooming.
“Todos los rivales son fuertes, campeones de sus países, pero el campeón se definirá por detalles, algo característico de los torneos cortos, donde un error o una virtud hacen ganar o perder, serán partidos apretados, hay que estar muy atentos a esos detalles”, dijo Bravo.
El estratega destacó el trabajo institucional de Independiente, “un club en el que los niños desde los 10 o 12 años están acostumbrados a pelear por título, y que constantemente están peleando torneos internacionales”.
Bravo habló del “reto” que significa para el equipo sub-20 de los rayados volver a ganar la Libertadores. “Es una presión que tenemos por jugar en casa, pero llegamos con esa idea. Tenemos que volver a ser campeones”, apuntó.
A su favor, Independiente tiene además la estadística de ser el único equipo de Conmebol con presencia en todas las ediciones del torneo, con dos finales consecutivas jugadas (2018 y 2020) y un título en su palmarés, del que inician la defensa. (D)