El Salvador vuelve a sonreír. La clasificación a la Copa Oro de la Selecta es el primer objetivo marcado en la hoja de ruta que planificó a su llegada al país. Tras varios vaivenes en el banquillo de la selección, David Dóniga ha sabido reconducir una situación crítica. Con el español al frente, los salvadoreños volvieron a la senda de la victoria, una palabra que hacía más de un año y medio que no se nombraba en el país. Sus números le colocan a la par de una leyenda de la Selecta, como Carlos de los Cobos.