En 1964 empezaron los choques entre Ecuador y Venezuela, en el orden futbolístico, cuando en la Copa Libertadores se enfrentaron Barcelona SC y Deportivo Italia. Y desde aquella vez, siempre que en el horizonte aparece un enfrentamiento contra el balompié llanero (a nivel de clubes o selecciones), en el país se habla de “victoria obligada”, “triunfo inminente”, “superioridad histórica”, “si no se les gana será una tragedia”, y otras expresiones que implican subestimar al fútbol de la tierra de Simón Bolívar.