¿Messi… Haaland… Mbappé…? Uno de los tres subirá el lunes al escenario del Teatro del Chatelet, en París, a recibir el Balón de Oro 2023; los otros dos lo aplaudirán desde la primera fila. De ganarlo Haaland o Mbappé, será una distinción bautismal; de obtenerlo Messi, establecerá un récord que tal vez dure cien años: 8 trofeos. ¡OCHO…! Una locura. Es muy curioso: el fútbol es un deporte colectivo en el que fascina lo individual. Veneramos al goleador, nos interesa saber quién fue la figura de la cancha, buscamos permanentemente al superhéroe. Y el Balón de Oro es la exaltación de la individualidad, un título de nobleza para toda la vida. Uno dice “Ruud Gullit, Balón de Oro 1987″, “Hristo Stoichkov, Balón de Oro 1994″… Casi deberían incluirlo en sus tarjetas de presentación. Messi necesitaría tarjetas tamaño carta.