Que cobrar varios de los astronómico sueldos que paga Barcelona, que tiene una deuda de $51 624 789 –según reveló la auditoría de la firma PK, con corte hasta el 30 de septiembre de 2019– “no es culpa de los jugadores. Cuando uno va a buscar un jugador a nivel internacional, y de renombre, seguramente tiene otras ofertas, y esa pugna normalmente significa ese tipo de errores en los directivos”, dijo Carlos Alfaro Moreno, actual presidente del club canario.