En momentos en que parecía que sólo una decisión polémica de los jueces salvaría a Saúl “Canelo” Álvarez de una derrota ante un rival más grande que él, el mexicano se sacó de la chistera un par de puñetazos para derribar a Sergey Kovalev en el undécimo asalto y apoderarse del cetro de los semipesados por la Organización Mundial de Boxeo.