No solo porque ganó medalla de oro, no únicamente porque es la segunda consecutiva, también por la manera en que se consagró en los Juegos Panamericanos de Lima, el tricolor Andrés Montaño se metió en la historia del deporte nacional. El pasado miércoles, en los cuartos de final de las competencias de lucha grecorromana, en 60 kilos, el esmeraldeño de 29 años dio una exhibición de coraje y de técnica para acabar con la ventaja de 6-0 del cubano Luis Orta y clasificar a semifinales. Montaño, campeón en Toronto 2015, ganó las siguientes fases y se va de Perú con el título. Ahora espera más ayuda oficial y no pide ni casa ni dinero, pero sí exige atención para seguir “luchando por sus hijos y por el país” y para estar en los Juegos Olímpicos 2020.