No estábamos ahí para verlo, pero la eterna sonrisa Kolynos de Jurgen Klopp debe haber desaparecido en ese histórico minuto 95 y 1 segundo en que Lucas Moura marcó su tercer gol al Ajax y le dio al Tottenham un heroico pase a la final de la Champions. Al técnico alemán del Liverpool, estamos persuadidos, le hubiese gustado más el Ajax como rival.