Hace unas horas charlábamos con los amigos que integran las ‘galladas’ que se instalan en el bulevar 9 de Octubre sobre los viejos clásicos del Astillero que se jugaban en los estadios Capwell y Modelo Guayaquil. Todos coincidían en que se vivía una bella fiesta en la que participaban grandes jugadores que pasaron a la historia por su calidad y su integridad moral evidenciada en su compromiso para con su divisa.