“Son circunstancias del fútbol”. Con ese argumento minimizó Guillermo Almada, entrenador de Barcelona, al penal fallido de Matías Oyola frente a Independiente del Valle, la tercera pena máxima consecutiva que los canarios desaprovechan –la semana anterior, dos en los pies de Ariel Nahuelpán– y que el viernes les costó el triunfo ante los negriazules (0-0).