Tal vez los jóvenes que siguen el deporte no conozcan o han olvidado lo que alguna vez leyeron sobre la portentosa Hazaña de Lima. Se trató de un suceso que asombró a América y el mundo y cuya repetición, en las condiciones actuales, sería imposible. Es tanta la admiración generada por la victoria ecuatoriana que el Salón de la Fama de la Natación Mundial, con sede en Fort Lauderdale, Florida, Estados Unidos, le entregó un espacio gracias a las gestiones del exdirigente Luis Chiriboga Parra, ya fallecido.