El registro de llamadas en los teléfonos celulares y las fotografías satelitales fueron clave para determinar la vinculación de los implicados en el ataque al excomandante general de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE), Jorge Gabela.
Así lo señaló esta mañana el ministro del Interior, Alfredo Vera, durante la presentación de las pruebas que implican a los cuatro detenidos en el caso Gabela. Vera estuvo acompañado por el comandante general de la Policía, Fausto Franco, y del fiscal de Samborondón, René Astudillo, en el casino de oficiales del cuartel Modelo de la Policía.
Publicidad
El fiscal Astudillo señaló que la telefónica Claro entregó las llamadas realizadas desde los números celulares de los detenidos. Con este registro, explicó, se determinó la comunicación que mantenían los detenidos la madrugada del 19 de diciembre, cuando Gabela recibió un disparo en la puerta de su casa en la urbanización Tornero del Río (vía a Samborondón).
Julio Sánchez (alias Sianca), Máximo Torres, Teófilo Meléndrez y el cabo primero de Policía Mario Orlando Mendoza Pérez están con orden de prisión preventiva por “intento de asalto a mano armada”.
Publicidad
Vera señaló que los detenidos seguían a Sofía Gabela, hija del oficial, para robarle, y que al llegar a la vivienda el intento de asalto fue truncado por el excomandante, quien recibió un disparo que lo mantuvo diez días asilado en el hospital Luis Vernaza hasta su fallecimiento. Los delincuentes no se llevaron pertenencia alguna de la familia.
Para Vera, el ataque a Gabela se trata de un caso de delincuencia común, descartando que haya sido intento de asesinato como alegaba la familia del excomandante.
Sobre el caso del cabo de Policía, Vera explicó que su vinculación se dio porque tenía en su poder uno de los teléfonos que llevaba uno de los detenidos en el caso Gabela. “Él dice que lo compró –un día después del incidente– en la Bahía, pero eso hay que comprobarlo”, sostuvo Astudillo.