Ex dirigente de PAIS niega haber recibido dinero del narcotráfico y reconoce haberse reunido 7 veces con Raúl Reyes.

Para limpiar su nombre y la imagen del Gobierno, así como frenar los comentarios sobre el supuesto aporte del narcotráfico a la campaña presidencial de Rafael Correa, el ex asesor del Ministerio de Seguridad Interna y Externa y el ex  dirigente del movimiento PAIS, José Ignacio Chauvín, dijo entregarse ayer a la justicia.

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Con la detención de Chauvín, la expectativa de la Fiscalía se centra en conocer los pormenores de sus supuestos vínculos con los hermanos Jefferson, Édison y Miguel Ostaiza, acusados de narcotráfico en el proceso Huracán de la Frontera.

Sin negar su relación de amistad con Édison Ostaiza y con el fallecido líder de las FARC, Raúl Reyes, Chauvín llegó a las 15:00 de ayer a las instalaciones de la Fiscalía, a bordo de una moto. Estuvo acompañado de una segunda persona, que hacía las veces de conductor.

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Su llegada movilizó a unos 30  policías que, vestidos de civil, lo esperaban para capturarlo y cumplir la orden de prisión preventiva dictada por la jueza 4ª de lo Penal del Guayas, Zoila Alvarado.

Entrega en Fiscalía General
Ese objetivo no se cumplió. Alrededor de 40 miembros de la Brigada Simón Bolívar (BSB) del movimiento PAIS impidieron la captura de Chauvín y más bien le abrieron paso para que ingrese a esa dependencia y se entregue al fiscal general, Washington Pesántez.

Al final lo recibió el fiscal subrogante, Alfredo Alvear, ante la ausencia de Pesántez.

Por no tener competencia, Alvear entregó a Chauvín al director de la Policía Judicial de Pichincha, Juan Sosa, quien públicamente le leyó sus derechos constitucionales. Luego lo trasladó a las instalaciones de la Policía Judicial, donde armaron el expediente, le tomaron fotos y sus huellas digitales.

Tras su entrega, Chauvín prefirió no dar declaraciones a la prensa, aunque dirigió unas palabras a sus compañeros de la BSB, que visiblemente afectados llorando, pedían a gritos justicia para su compañero.

A ellos, Chauvín les solicitó que se retiren tranquilos, ya que probará que jamás recibió dinero del narcotráfico, aunque no negó su relación de amistad con Édison Ostaiza.

Amistad con Raúl Reyes
Esa fortuita amistad, dijo Chauvín, nada tiene que ver con su lucha por el intercambio humanitario y con el hecho de que fue “amigo de muchos revolucionarios”, entre ellos, el guerrillero Raúl Reyes. “Con él me reuní siete veces, Gustavo (Larrea) solo una vez”, dijo.

Esos temas son totalmente distintos, explicó Chauvín a sus compañeros. Denunció que la orden de prisión en su contra obedece a un golpe político,  que intentó lastimar a un sector del movimiento PAIS.

Por ello, liberó de cualquier responsabilidad al Mandatario y a su amigo, el ex ministro de Seguridad Interna y Externa, Gustavo Larrea,  quien renunció a su candidatura de asambleísta porque a su ex asesor lo involucraron en el caso.

Golpe que, según los miembros de la BSB que prefirieron el anonimato, es fruto de una retaliación de los políticos tradicionales incrustados en el Gobierno, que intentan impedir el desarrollo de sectores revolucionarios en PAIS.

Según Marcelo Román, abogado de Chauvín, su cliente se enteró que enfrentaba una orden de prisión cuando visitaba territorio amazónico, controlado por los grupos no contactados Tagaeri y Taromenane. Sin embargo,  decidió entregarse.

Tras aclarar que Chauvín nunca fugó del país, Román solicitó a la Fiscalía que pruebe su culpabilidad o caso contrario deje sin efecto la orden de prisión, pues el caso –a su juicio– está sustentado en presunciones y no en hechos concretos.

Amigo de los Ostaiza
Chauvín fue vinculado en el caso, luego de  testimonios recopilados por la Fiscalía, entre ellos, el de su amigo, el ex abogado de la Aldhu y ex militante de PAIS,  Diego Benítez Osejo.

En la versión del 12 de noviembre del 2008, Benítez Osejo, que entró a trabajar en junio del año pasado a la compañía Jooamy Ema, propiedad de los Ostaiza, dijo haber sido recomendado por su amigo, a quien conocía como  Nacho para dar asesoría en temas petroleros.

Otra de las declaraciones que lo involucran es la del jefe administrativo de la compañía, Juan del Castillo Vallejo (17 de septiembre del 2008), quien señala que un contacto (Chauvín) estaba ayudando  para la adjudicación de pozos petroleros.

Asimismo, la secretaria de Jooamy, Tatiana Durán (17 de septiembre del 2008), menciona a  Nacho  como funcionario del Gobierno, quien se encargaría de conseguir un contrato para explotar petróleo.

Chauvín fue trasladado en la noche hasta la Penitenciaría del Litoral.

Nueva indagación
El fiscal antinarcóticos del Guayas, Jorge Solórzano, aseguró que si continúan las vinculaciones en el proceso Huracán de la Frontera por tráfico de drogas, tendrá que abrir una nueva indagación previa por el delito de organización, acción y financiamiento de actividades narcodelictivas. Esto porque la ampliación de 30 días que le otorgó el Juzgado Cuarto de lo Penal no le alcanzará para completar las vinculaciones dentro del caso.

Investigación interna
Además de ese proceso, la Policía indaga a los capitanes Pablo Córdova y Carlos Navarro, vinculados en el caso. La investigación la lleva la Unidad de Asuntos Internos. Los uniformados se encuentran en los calabozos del Comando Guayas.