El ex mandatario León Febres-Cordero falleció esta tarde, a los 77 años de edad, víctima de dos enfermedades en los pulmones: el enfisema y el cáncer. Los restos de quien durante muchos años fuera el político más influyente de Ecuador recibirán velación en la Catedral.
Sus restos serán velados en la Catedral de Guayaquil desde las 20:00 de este lunes hasta el mediodía del miércoles para que los ciudadanos ecuatorianos expresen su pesar. En la tarde, sus restos tendrán un velatorio íntimo y serán enterrados en el cementerio Parques de la Paz, en la vía a Samborondón.
Publicidad
Decenas de personas se agolparon en las afueras de la Clínica de Guayaquil donde falleció el ex mandatario para despedirlo entre elogios y lágrimas.
Pasadas las 16:00 el movimiento de personas fue mayor, todos los familiares ingresaron, mientras en los exteriores decenas de allegados y periodistas presumían que el líder político había fallecido.
Publicidad
El alcalde de Guayaquil Jaime Nebot, amigo cercano de Febres-Cordero, dijo hoy que "ante el sensible fallecimiento del ingeniero León Febres-Cordero Ribadeneyra, ex presidente de la República y ex Alcalde de Guayaquil, el país y su ciudad están de luto por tan irreparable e irremediable pérdida que ensombrece el quehacer nacional".
"El cáncer pulmonar, en estado avanzado, le ocasionó una asfixia que terminó con su vida, pero siempre estuvo con la cabeza en orden", indicó el ex ministro Francisco Swett, uno de los amigos y colaboradores de Febres-Cordero.
"A las 16:30 el presidente Febres-Cordero dejó la mortalidad de la tierra y pasó a la inmortalidad de la historia", informó el ex diputado Alfonso Harb, un estrecho colaborador.
Ingeniero mecánico de profesión y nacido en Guayaquil, Febres-Cordero saltó de la empresa privada a la política a mediados de la década de los 60 como líder indiscutido de la derecha.
Ocupó la presidencia de 1984 a 1988, y el 2002 declinó ser postulado para otro mandato aduciendo razones de salud. También fue Alcalde de Guayaquil después de dejar la presidencia.
Febres-Cordero gozó de indiscutida popularidad entre la gente de derecha y de gran parte de la población, aunque sus detractores lo acusaban de autoritario y de imponer sus intereses personales sobre los del país, lo cual él rechazaba.
"Febres Cordero es el dueño del país", solían afirmar sus contrincantes para descalificarlo en la lucha política.
"Si yo fuera el dueño del país, el país no andaría como anda: de tumbo en tumbo", replicó con ironía en más de una ocasión.
Lucía una melena encanecida y una mirada penetrante que parecían justificar su nombre de León, como era conocido popularmente y por el cual se le nombraba en los medios políticos, periodísticos y entre la población en general.
"Habló León o Lo dijo León", y todo el mundo sabía que se trataba del ex presidente.
Nacido en Guayaquil el 9 de marzo de 1931, estuvo casado con Eugenia Cordovez y tuvieron cuatro hijas. En segundas nupcias, se casó con Cruz María Massú, sin tener hijos.