El presidente Alan García tomó juramento este martes a su nuevo jefe de gabinete, el izquierdista Yehude Simon, en medio de señalamientos por su presunto pasado terrorista, mientras ratificó en sus cargos a 10 ministros y cambió a otros seis.
Al tomar juramento a Simon en el Palacio Presidencial, García dijo que esperaba del nuevo primer ministro una eficaz lucha contra la corrupción, contra la pobreza, y contra los embates de la crisis financiera internacional.
Publicidad
García pidió a Simon defender al país de la dramática crisis internacional que lo amenaza, combatir la pobreza y la miseria y luchar activamente contra la corrupción.
Sancionar todos los hechos (de corrupción), detectar las personas que la cometen, y librar a nuestro gobierno y al país de ese fantasma, fue el exhorto del mandatario a Simon.
Publicidad
García viene saliendo de la peor crisis política que ha enfrentado en sus dos años de gestión y que provocó la renuncia de todo el gabinete.
Con la designación de Simon y los cambios en el gabinete ministerial el mandatario espera superar la crisis política desatada tras un escándalo de supuestos negociados en la licitación de lotes petroleros en que fueron involucrados dos militantes del partido APRA, del gobierno.
Simon, de 61 años, es un político independiente e izquierdista moderado, que se desempeñaba como presidente del gobierno regional de Lambayeque. Asume la presidencia del Consejo de Ministros en reemplazo del oficialista Jorge del Castillo, que el jueves renunció junto a todo el gabinete.
García ratificó en sus cargos al ministro de Economía, Luis Valdivieso, al de Relaciones Exteriores, José Antonio García Belaunde, al de Defensa, Antero Flores-Aráoz, a la ministra de Comercio Exterior y Turismo, Mercedes Aráoz, y la de Transportes, Verónica Zavala.
Asimismo ratificó al ministro de Trabajo, Jorge Villasante; al de Vivienda, Enrique Cornejo; al de Educación, José Antonio Chang; al del Ambiente, Antonio Brack, y a la ministra de Justicia Rosario Fernández.
En tanto, designó como nuevo titular de Energía y Minas, a Pedro Sánchez, en reemplazo de Juan Valdivia; del Interior a Remigio Hernani en reemplazo de Luis Alva; de Salud, a Oscar Ugarte, quien sucede a Hernán Garrido-Lecca; de Agricultura a Carlos Leyton en lugar de Ismael Benavides; de la Producción a Elena Conterno en reemplazo de Rafael Rey, y como ministra de la Mujer, a Carmen Vildoso en reemplazo de Susana Villarán.
El gabinete en pleno renunció el pasado jueves deslindando su responsabilidad en los hechos de presunta corrupción destapados con la difusión de audios que registraban conversaciones entre un funcionario público y un ex ministro de García sobre los pagos que recibirían por conseguir que la empresa noruega Discover Petroleum se adjudicara la concesión de lotes petroleros, lo que efectivamente ocurrió en un proceso de licitación en septiembre.
La designación de Simon, quien goza de popularidad por su destacada gestión como presidente regional de Lambayeque y es visto como un político concertador, es considerada por analistas como una eficaz maniobra de García para recuperar la confianza de la población.
Simon, sin embargo, arrastra un pasado de ocho años y medio en la cárcel por sus supuestos vínculos con el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA).
El congresista fujimorista Carlos Raffo afirmó el martes que Simon fue miembro del Comité Central del MRTA y que usaba el seudónimo de Camarada Bodero. Mostró un supuesto documento de la Dirección de la Policía contra el Terrorismo que dijo le fue entregado por un peruano preocupado.
Dijo que el Camarada Bodero va a juramentar como primer ministro de este país, y eso a muchos de nosotros nos llama a la indignación.
El legislador pidió la desclasificación de todos los documentos referidos a la sentencia e indulto de Simon, que rechazó las acusaciones, afirmando que no temía ninguna investigación de su pasado.
Mi vida es pública, que desclasifiquen todo lo que quieran, no tengo absolutamente nada que ocultar, aseveró.
El político, que fue en el pasado un izquierdista radical, fue condenado en 1992 durante el gobierno de Alberto Fujimori por apología del terrorismo a 20 años de prisión por un tribunal sin rostro.
Su caso fue defendido por los grupos de derechos humanos y finalmente fue indultado en el 2000 por el gobierno de transición de Valentín Paniagua. En el 2002, el presidente Alejandro Toledo lo desagravió públicamente.
La designación de Simon fue bien recibida por la oposición y por los empresarios.
El ha concertado con las empresas para promover el desarrollo, sin dejar de lado a la gente de menos recursos... Ha promovido una economía social de mercado, que es lo que manda la Constitución, destacó José Luis Silva, presidente de la Asociación de Exportadores del Perú (ADEX).