Aseguró que más del 85% de la población apoya a la Asamblea y que “estos señores no están obedeciendo a los electores, sino a los patrones de los partidos políticos... Estamos hablando de cosas que sobrepasan las tres o cuatro reformitas con las cuales estos señores quieren calmar la rebelión del pueblo ecuatoriano”.
Agregó que lo que el Congreso quiere es darle “aspirina a un cáncer terminal”, porque ellos no han entendido nada.
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También marcó ayer diferencias entre su elección y la de los 100 diputados que hoy se posesionan en el Parlamento.
“No me digan que así como yo he sido elegido legítimamente, ellos también. !Perdónenme! En las elecciones del 15 de octubre el voto nulo le ganó a los diputados en 15 de las 22 provincias. El nulo tendría como cuarenta escaños”, señaló Correa mientras recorría varias provincias del país para promocionar su Asamblea Constituyente.
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Según el mandatario electo, no busca confrontación con el nuevo Parlamento, pero arremetió contra lo que denomina “frente anticonstituyente, que ya vemos que hasta quiere excluir de las comisiones legislativas a otras agrupaciones”.
