Quienes motivaron la salida de Lucio Gutiérrez del poder adoptaron el apelativo de “forajidos”. Ahora quienes colocan a su partido en el tercer lugar de las presidenciales, especialmente habitantes del Oriente, se autocalifican de “primitivos”, término que, aseguran, surgió también de las mismas jornadas de protestas en las calles de Quito, en abril del 2005. Aquí algunas de sus razones. El Oriente, el sector indígena dividido y los agricultores en abandono fueron aliados electorales de Sociedad Patriótica. José Ávila, residente de la comunidad San Pedro de Sacha (Orellana); Milo Miño, quien vive en una casa de tablas en Jambelí (Sucumbíos); José Manuel Toaquiza, indígena tungurahuense, y José Ronquillo, agricultor de Babahoyo, son cuatro de los 946.202 ciudadanos que el pasado domingo dieron su voto por Gilmar Gutiérrez, candidato presidencial de Sociedad Patriótica (SP).