La historia de ese documento, escrito en dos hojas de papel bond, a mano y con varias faltas de ortografía, empieza el 26 de febrero cuando un sujeto no identificado se acercó hasta las oficinas del Alto Comisionado de las Naciones Unidas en Colombia, para denunciar el supuesto plan que terminaría con la vida de Gutiérrez el 16 de mayo de este año.