Un equipo de científicos neocelandeses anunció que clonó vacas capaces de producir leche de características diferentes a la normal y que, por ejemplo, es más resistente al calor, indica la revista Nature Biotechnology.
Nueve de las once vacas clonadas producen leche que contiene cantidades mucho más importantes de dos proteínas que las de las vacas normales: entre 8 % y 10 % más de caseína y el doble de kapa-caseína.
Según el autor de este experimento, el profesor Pr Gotz Laible, investigador del AgRuakura Research Centre de Hamilton (Nueva Zelanda), la abundancia de esas dos proteínas permitiría facilitar la fabricación de quesos y ayudaría a la industria de los lácteos reducir substancialmente sus costos.
Todo ello a condición, por supuesto, que las autoridades sanitarias de los países concernidos autorizaran esos nuevos productos y que los consumidores, ya reticentes respecto a los productos vegetales genéticamente modificados, aceptaran consumir esos nuevos productos.
Los científicos clonaron en el pasado bovinos con éxito con el objetivo de ayudar a la fabricación de nuevos remedios, las llamadas "proteinas-medicamentos". Pero ésta es la primera vez que una tentativa de este tipo se realiza con el objetivo de cambiar las características de la leche destinada al consumo.
En total, 126 tentativas de clonación fueron necesarias para obtener once vacas clonadas, precisa la revista científica.
Desde el nacimiento de la oveja Dolly en 1997, científicos de diferentes países lograron clonar ratones, vacas, cabras, cerdos, conejos e incluso gatos. Sin embargo, en la lista no figura ningún mono, el animal considerado como el más cercano al hombre.
Además del hecho de que solamente una de cada seis tentativas de clonación desemboca en un nacimiento, buen número de los animales clonados mueren poco después de haber nacido y muchos de los que sobreviven más largo tiempo sufren defectos congénitos o deformidades graves hasta el punto de ser monstruosos.
La lista de los problemas que acechan a los clones sobrevivientes es larga: malformaciones congénitas del corazón, de los pulmones, de los riñones, hipertrofia del hígado, deformidades físicas, deficiencias del sistema inmunitario, envejecemiento prematuro, artritis, etc.