La cámara de Diputados de Paraguay aprobó, el jueves, por mayoría el inicio de un proceso de juicio político al presidente Luis González Macchi por cinco cargos de corrupción y mal desempeño de funciones.
 
"De 61 diputados presentes, 50 votaron por el juicio, ninguno se opuso y once se abstuvieron", dijo un portavoz de la cámara.
 
Los cargos fueron propuestos de forma sorpresiva por el diputado opositor Blas Llano y recibieron la adhesión de facciones disidentes del gobernante Partido Colorado.
 
González Macchi se encontraba en Brasilia, asistiendo a la cumbre del Mercosur, la unión aduanera que Paraguay integra con Argentina, Brasil y Uruguay.
 
Paraguay tomará su turno en la presidencia pro tempore del Mercosur durante el próximo semestre.
 
En Asunción, la presidencia se vio obligada a salir al paso de versiones que indicaban una supuesta renuncia del mandatario.
 
"El presidente (...) no va a renunciar. Creo que ésta es una bola de rumores aprovechando la presencia en el Mercosur de manera de alterar todo el orden en el país", dijo a periodistas el portavoz oficial de la presidencia, Osvaldo Bergonzi.
 
La presidencia es ejercida en ausencia de González Macchi por el titular del congreso, el senador oficialista Juan Carlos Galaverna.
 
La vicepresidencia paraguaya está vacante desde la renuncia del dirigente opositor Julio César Franco, quien dejó el cargo en octubre para postularse a la presidencia en las elecciones generales previstas para el 27 de abril.
 
"Yo no tengo la más mínima intención de quedarme en la presidencia. Ejerceré el cargo por las horas que haga falta y nada más", dijo Galaverna a periodistas, consultado acerca de su eventual llegada a la presidencia.
 
El listado de acusaciones incluye el uso de un automóvil robado en Brasil como móvil presidencial, desvío de fondos de bancos privados intervenidos por el estado, mal uso de fondos de la presidencia, fraude en un frustrado proceso de privatización de empresas públicas y mala gestión.
 
La cámara baja nombró a cuatro diputados como encargados de estudiar y redactar la acusación oficial, que sería presentada como máximo 20 de diciembre ante el Senado, en coincidencia con el inicio del periodo de receso parlamentario.
 
"Es altamente probable que presentemos la acusación formalmente redactada y documentada incluso antes de este plazo", dijo el diputado opositor Rafael Filizzola, quien preside la comisión de acusación.
 
Según la legislación paraguaya, los cargos deben ser evaluados por el Senado, de 45 miembros, que actúa como juez y necesita 30 votos para destituir al mandatario.
 
El Partido Colorado y sus aliados podrían tener la cantidad de votos suficientes en el Senado para impedir la destitución.
 
González Macchi pudo impedir en seis ocasiones anteriores la radicación de un proceso de enjuiciamiento, urdiendo alianzas en la Cámara de Diputados.
 
"Parece que esta vez la historia puede ser diferente, porque el Partido Colorado necesita tomar distancia de González Macchi en las elecciones de abril, y su presencia es un costo político demasiado alto", dijo Filizzola. "Incluso su escudo en Diputados está roto".
 
González Macchi asumió el gobierno en marzo de 1999, luego del asesinato del vicepresidente Luis María Argaña y la renuncia del entonces presidente Raúl Cubas, por ser titular del Congreso y tercero en la línea de sucesión del poder.
 
Un fallo de la Corte Suprema de Justicia le adjudicó el poder hasta agosto de 2003, pese a que la constitución indicaba que debía cumplir apenas un gobierno provisorio hasta la elección de un nuevo presidente.
 
En sus 41 meses de gobierno hasta la fecha de la encuesta, se ha visto envuelto en los mayores escándalos de corrupción desde el fin de la dictadura de 35 años de Alfredo Stroessner, en 1989.
 
Argaña fue asesinado a balazos en un atentado callejero atribuido a Cubas y su mentor, el ex general golpista Lino Oviedo.
 
Oviedo está exiliado en Brasil, prófugo de una condena a diez años por un intento de golpe de estado de 1996, y es acusado de ser además el ideólogo de otros dos intentos de levantamiento militar.
 
El ex militar escindió el Partido Colorado en mayo para fundar su propio partido, que espera que una amnistía permita presentarse a los comicios de abril.
 
Legisladores afines a Oviedo votaron el jueves sin excepción por el juicio político al presidente.