El ministro de Energía, Fernando Santos Alvite, asegura que en julio saldrá por fin la licitación de Campo Amistad, un tema al que se había comprometido apenas comenzó su gestión. Además explica cómo se enfrentará el próximo estiaje y en qué condiciones se haría una renegociación del oleoducto de crudos pesados, el cual termina contrato en los próximos meses.

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¿Cómo vamos a enfrentar el próximo estiaje, cuál es la estrategia?

Estamos buscando fuentes alternas de generación. Una de ellas es reparar el parque autogenerador, por ejemplo, hay una planta en Esmeraldas de 100 MW que está dañada, pero que se puede reparar hasta octubre. Estamos buscando generación temporal: la empresa Soenergy tendría listos en 120 días la entrega de 150 MW. El arrendamiento sería para seis meses. También estamos viendo la posibilidad de traer un barco que genere 200 MW con la compañía turca Karpowership. Sin embargo, con ellos el mínimo plazo es de tres a cuatro años de arrendamiento. Pueden generar con gas natural. Este viernes tuvimos reunión con Cenace, Celec, CNEL, para analizar las alternativas. Debido a que estamos en periodo electoral, no queremos dejar atado al nuevo gobierno a un contrato de gas a largo plazo. Es una cuestión de delicadeza, no se vería bien. Más bien varmos a ir por una solución temporal. Creemos lamentablemente que va a ser a diésel.

¿Se estaba pensando en importar gas natural, qué pasó?

Se pensó por un momento incrementar la capacidad de Termo Machala, que puede usar 50 millones de pies cúbicos y generar 180 MW, pues ahora está utilizando 15 millones y generando la tercera parte. Esos 35 millones de pies cúbicos faltantes se pensó traerlos en un barco y conectar a la planta de Termo Machala, pero lamentablemente la conexión no es posible técnicamente. Se ha descartado esta propuesta, aunque Sycar la está estudiando. Se va a hacer un nuevo análisis con un experto internacional. De todas maneras, creemos que vamos a pasar el estiaje que se avecina de manera exitosa.

Si no hay tanto gas para Termo Machala y se estaba pensando hasta en importar, ¿por qué le están dando gas a la planta de Gas Vesubio de Eljuri?

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Gas Vesubio hizo una planta que está en perfecto estado, que no ha funcionado por falta de gas.

También por falta de permisos porque no los cumplieron de manera prolija.

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También por eso, pero creo que eso ya arreglaron. Lo que quiero decir es que como está lloviendo torrencialmente en el país y las plantas hidroeléctricas están generado a tope, se ha bajado la necesidad de gas por parte de Termo Machala, y esta central lo estaba quemando. Para dejar de quemar, por ciertas horas al día se le está dando a Gas Vesubio, solo durante la temporada que haya exceso de agua en las plantas hidroeléctricas, pero cuando Termo Machala lo requiera se le quitará el suministro a Gas Vesubio.

Un tema sensible es Campo Amistad, que no termina por concretarse, aunque sería una opción para la autosostenibilidad energética del país, justamente con gas que se requiere. ¿Qué va a pasar con este campo?

La licitación del Campo Amistad está lista. Hubo dos problemas, más bien ambientales. El Gobierno con muy buena intención decretó que era zona de amortiguamiento de 8 millas del perfil costanero y que se restrinjan las actividades extractivas. El Ministerio del Ambiente ha dicho que como el gas es limpio sí se dará permiso para que se realice actividad de gas. Adicionalmente, el Gobierno anterior declaró Parque Nacional a la isla Santa Clara, declaró parque nacional a un área que solo tiene piedras, fue innecesaria esa declaración. En ese sector se ha detectado una gran posibilidad de encontrar más gas. Se está hablando con el Ministerio del Ambiente para levantar esas restricciones. Petroecuador, que maneja el proyecto, nos ha dicho que saldrá en julio la licitación.

QUITO (09-06-2023).- Fernando Santos Alvite, ministro de Energía y Minas, durante una entrevista, en su oficina, en Quito. Alfredo Cárdenas/ EL UNIVERSO. Foto: Alfredo Cárdenas.

¿Es decir, ya no pasará al ministerio como usted había dicho?

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Ya no. La idea era que pase al ministerio para sacar no solo Campo Amistad, sino dos bloques contiguos, pero hemos visto que por papeleo y tramitología sería muy complicado. Vamos a sacar Campo Amistad con un área pequeña que incluye la isla Santa Clara. Creemos que sí va a haber apetito y dejaremos para segundo momento los otros dos bloques que son de más riesgo.

¿Usted está en capacidad de asegurar que sí van a sacar Campo Amistad antes que el gobierno se acabe?

Desde el primer día yo he venido presionando para la licitación, Petroecuador se ha dado las vueltas, pero ahora el gerente Ramón Correa y el jefe de proyectos, Tomás Márquez, nos han ofrecido en el Comité de Inversiones que preside el ministro Roberto Salas que para julio lo sacarán. Tomo la palabra de ellos.

¿Van a alcanzar a resolver el tema del OCP? ¿Este contrato se termina en diciembre del 2023 o en febrero del 2024?

El contrato termina en diciembre del 2023, pero como hubo 74 días de suspensión por los derrames se entiende extendido el contrato. Hemos conversado con los ejecutivos de Pampa y ellos preferirían que se terminen las negociaciones -que ya están avanzadas- en este gobierno. Creemos que sí lo vamos a hacer, la idea es que la compañía financie el desvío de ruta, son 60 kilómetros de desvío, que cuestan alrededor de $ 120 millones, hay $ 100 millones de mantenimiento integral. Quisiéramos extenderle el contrato.

¿Por que se está hablando con Pampa, y qué dicen los otros socios de OCP?

Pampa tiene el 60 % porque acaba de comprarle a Repsol sus acciones; el 36 % lo tiene Andes y el 4 % Perenco. Pampa como accionista mayoritaria está conduciendo las negociaciones, y los señores de Andes, que son parte de OCP, -pero que quieren una extensión de los contratos de bloques, que se vence en 2025, y con quienes hemos llegado a un acuerdo de extenderles 15 años más el contrato-, también están inclinados a sumarse al interés de Pampa de extender el contrato.

¿Cómo sería la figura, para el tema de OCP? No está claro, porque usted ha dicho que la infraestructura del OCP debe pasar a manos del Estado, pero esto no sería extender el contrato, sino más bien firmar un nuevo contrato. ¿Cómo lo están viendo ustedes?

Es la disyuntiva que tenemos. Yo me basé en el antecedente del año 1985 cuando fui viceministro. En ese tiempo, el SOTE que había sido construido por la Texaco terminó su periodo de amortización en ese año y debía pasar al Estado. Así, la tubería pasó a manos del Estado, pero la operación y mantenimiento se le siguió encargando a Texaco. Yo les he planteado esta figura, pero Pampa sostiene que el contrato permite una extensión y que pueden seguir siendo dueños hasta que se amorticen las nuevas inversiones. Es un punto de vista legal que no lo hemos resuelto aún. Este es un punto crucial.

Como Estado, entonces, no se debería hablar de extensión, sino de nuevo contrato, porque ya debe pasar al Estado. ¿Eso sería lo más conveniente?

Depende de qué ruta tomemos. Si pasa la infraestructura al Estado haríamos un nuevo contrato de operación y mantenimiento, pero si la tesis es que se extienda el contrato y siga en manos de Pampa, entonces sería una extensión. Son figuras semánticas.

¿Pero perderíamos algo o no?

Si el tubo es nuestro y ellos operan, nosotros recibiríamos un pago por el arrendamiento.

¿Y cuál ha sido el acuerdo con Andes?

Andes tiene los bloques 62, 14 y 17. Ellos se comprometen a realizar inversiones adicionales por $ 200 millones y nos perdonan la deuda de $ 150 millones por carry forward. Se ampliaría el contrato por 15 años.

¿Esto de ampliar por 15 años no sería caer en indelicadeza como lo que usted dice no quiere hacer con el tema del gas?

No, porque estos son campos que vienen operando desde los años 70. Andes es subsidiaria de CNPC, una de las más grandes del mundo. Es una extensión de rutina, que no contiene ningún tema de controversia. También con la chilena Enap estamos avanzando en una negociación para nuevas inversiones que realizará la empresa, pero con ellos no es extensión, porque su contrato es hasta el 2035.

¿Con cuánto de producción petrolera piensa terminar el Gobierno?

Hemos estabilizado entre 470.000 y 480.000 barriles. El país tiene que reconocer que los campos son antiguos, tienen 50 años y van declinando, es un recurso no renovable. Cada año hay una declinación del 10 %. Creo que estaremos en 480.000 por algunos años.

A menos que se baje lo de ITT por la consulta.

Esperamos que no pase. Es importante que la ciudadanía conozca que Ecuador es rico en petróleo, hay inmensas reservas bajo tierra. Con recuperación mejorada se puede mantener la producción. Pero el suroriente está inexplorado. A las comunidades indígenas no les gusta la extracción, por eso hay que esperar que se emita la ley de consulta previa, que el Gobierno la tiene lista. Si nos ponemos de acuerdo y abrimos la frontera petrolera, seremos un país exportador por muchos años más. (I)