Aunque ocupan menos del 1% de la superficie global, albergan cerca del 10% del total de las especies conocidas y un tercio de los vertebrados. Sin embargo, los ecosistemas de agua dulce son los más amenazados del planeta y se ven cada vez más afectados por el impacto del crecimiento de la población humana y el desarrollo económico, según detalla la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) en un nuevo informe sobre su estado de conservación.