La entrada en funcionamiento del Metro de Quito fue una noticia positiva para el país, luego de tantos años y recursos dispuestos para esta obra. Sin embargo, ahora un importante asunto pone a prueba su gestión: el hundimiento de casas en un tramo.

Varios domicilios del barrio Solanda, en el sur de la capital, tuvieron que ser abandonados –ante la recomendación de las entidades de seguridad– por sus propietarios, porque se empezaron a destruir a causa del hundimiento.

‘Estamos completamente indignados’, dicen habitantes de Solanda por negativa de aseguradora en cobertura por casas afectadas

Los damnificados por este evento contaron a este Diario los problemas que les causa esta situación, como el tener que destinar recursos para pagar alquileres en otras zonas mientras esperan que desde el Municipio de Quito les den una respuesta que resuelva su situación. Aseguran que desde que se inició la construcción del Metro, que pasa debajo de sus casas, empezó a hundirse todo, y durante cinco años han reclamado a las autoridades.

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En un reciente episodio de este drama, las familias afectadas esperaban que la aseguradora a la que el Municipio pidió que activara las pólizas de reparación tuviera una respuesta favorable, pero no fue así. Aunque el informe final del estudio realizado en el sector de Solanda no ha sido revelado, el Municipio lo envió a la aseguradora para que cumpliera con su reparación. Han pasado los 30 días de plazo y la empresa respondió con una negativa. Así lo confirmó el alcalde de Quito, Pabel Muñoz, quien adelantó que continuarán con los recursos legales. También ha dicho que en caso de tener responsabilidad desde el Municipio actuarán por la reparación de los ciudadanos, quienes piden que si esto llega a ocurrir los montos sean acordes a sus inversiones.

Metro de Quito no revela detalles sobre el hundimiento de casas en Solanda

Es importante que un caso como este se atienda con la claridad y la rapidez necesarias, son más de 400 familias las que tienen problemas por el hundimiento de sus casas –algunas totalmente inhabitables– y que han tenido que cambiar toda la dinámica que se establece alrededor de un domicilio y un barrio, merecen respuestas justas y oportunas. (O)