Mi jefe este año fue extorsionado (recibió amenazas de secuestro y de muerte) por bandas delictivas que disputan el sector donde trabaja, lo que afectó su salud e hizo que termine hospitalizado por meses. Él ahora cumple los protocolos de la Unidad Antisecuestros refugiándose. Luego llegaron los problemas de energía a nivel nacional, sin embargo, hace lo posible por reiniciar su negocio y no cerrarlo.

Ecuador: desempleo, delincuencia y apagones

Sin embargo, hay una banca que dice ser “solidaria” que prefirió presionarlo y hacerle cumplir la letra vencida violando la Ley Orgánica de Defensa del Consumidor, escribiendo a familiares por WhatsApp en horarios no permitidos, llamadas normales y por WhastApp de manera insistente y repetitiva, causando hostigamiento para cumplir con sus objetivos internos de cobranza, ignorando la ley de alivio financiero, llevándose el presupuesto de las canastas de los trabajadores de esta Navidad. Hace falta calidad y calidez humana en este país. (O)

Ivonne Paredes, Guayaquil